Inspiro...
Y es
su imagen labrada
por
pinceladas de suspiros
lo que
me da el aliento vital,
el
secreto mágico de la continuidad de la vida
Experimento...
El
placer indescriptible de sentirse
Mucho
mas allá de un tiempo mortal
De
existir inmensamente por encima
De la
vida misma como flotando
En el
viento
Exhalo...
Y es
un fuego incontenible, inasible
Capaz
de carbonizar en segundos
El
universo entero
Que
quema mis cuerdas vocales
Apagando
un habla desesperada
Por
gritar que la quiero
La
veo...
Y es
el calco de mí mismo
Y es
mi espejo de temores
Pero
también de mil pasiones arquitectas de un futuro divino
Compartido
cual esperanza en el horizonte
Y
espero...
De sus
pulmones el aire mágico
Unico
capaz de despertar los míos adormecidos
Que
los dulces pétalos de su boca
Me
levanten de un letargo, claro, de anos
De
siglos
Y
sueno...
Con la
tibieza de sus manos
durmiéndose
como niñas traviesas
Sobre
las mías
En sus
verbos suaves
Conjugándose
a los míos
En los
tiempos sin horas
Sin
pasados ni futuros
Ansío...
El
momento en que nuestros ladrillos
Derrumben
las paredes sin miedo
Y
construyan un templo inmenso
Donde
el amor habite seguro
Tranquilo,
con pasión pura, eterna.
Autor: Juan Pablo Núñez Regueiro.